Las entidades financieras analizan el emitir sus propias blockchains para 2025
Por: Rafael Moreta
La rápida evolución de las tecnologías financieras y la creciente adopción de las stablecoins están planteando importantes desafíos a los bancos centrales en todo el mundo. Así consta en un reciente informe del Banco de Pagos Internacionales (BPI), presentado al G20.
Ninguna innovación ha captado la imaginación y el potencial de los mundos de la tecnología y las finanzas como las stablecoins. Estas monedas digitales, diseñadas para mantener un valor estable en relación con un activo de referencia subyacente (la mayoría de las veces una moneda fiduciaria como el dólar estadounidense), han surgido como un puente entre el sistema financiero tradicional y la tecnología blockchain. Varias entidades financieras han confirmado que emitirán sus propias stablecoins para 2025. La última de ellas, el BBVA.
El estudio muestra cómo la tokenización de activos y el surgimiento de monedas digitales emitidas por empresas privadas están transformando el panorama financiero y afectando funciones clave de los bancos centrales. En concreto, el informe cita áreas como pagos, política monetaria y estabilidad financiera. El BIS indica que algo primordial para los bancos centrales es si deben reaccionar, y en qué medida, a las iniciativas de tokenización en curso del sector privado.
Los stablecoins y la volatilidad de los mercados mundiales de cara al futuro

Entonces, una compañía llamada Tether tuvo la idea de crear un activo tokenizado referenciado al dólar. Usando la idea de la emisión inelástica, y del peg 1:1, asumió que un criptoactivo con esas características debería mantener un valor estable.
En España, como sucede con las fintech o las entidades bancarias más tradicionales, ya cuenta con los clientes y la autorización regulatoria para diversificar el modelo de negocio entrando a emitir una stablecoin parece perfilarse como la tendencia del 2025.
La aprobación, publicación y entrada en vigor del Reglamento 2023/1114, de mercados de criptoactivos, ha establecido el marco jurídico esperado para que entidades de crédito y otras instituciones fuertemente reguladas, puedan por fin entrar, con todas las garantías, en los mercados de activos digitales.
Toda esta transformación financiera que representa la creación de múltiples monedas estables repercutirá directamente y de forma progresiva en los mercados a nivel mundial. También impulsará nuevas formas de comprender las dinámicas de los activos digitales. Sin duda, el mundo financiero se encuentra ante una auténtica revolución cuyos principios y condiciones conviene seguir muy de cerca.